En 1968 los 'Beatles' escribieron 'Hey Jude', y el Manchester City se coronaba campeón de la Liga de Inglaterra por segunda vez en su historia.
43 años después el 'Etihad Stadium' vivía uno de los partidos más dramáticos y conmovedores que se hayan visto en los últimos tiempos. A los ciudadanos de Roberto Mancini, se les iba el campeonato de las manos ante un equipo que había entregado garra y corazón en la cancha para no descender.
El marcador estaba empatado y el tiempo jugaba en su contra. La incesante ofensiva de los locales era la última esperanza a la que se aferraban los aficionados de estos gladiadores que nos regalaban el espectáculo más vibrante de aquella mañana de mayo.
A dos minutos del final, un pase de Balotelli y un disparo furtivo de Sergio 'El Kun' Agüero, le daba la gloria eterna a la ciudad de Manchester que se vestía de azul y mandaba el silencio más agobiante al estadio del Sunderland, donde su enemigo de toda la vida - el Manchester United - bajaba los brazos ante la evidente derrota.
43 años después el Manchester City volvía a coronarse campeón mientras que en todo el estadio se coreaba aquella canción del 'cuarteto de Liverpool' como si ella misma volviera a nacer.
'Hey Jude' es una canción que habla de guardar la esperanza y de que tiempos mejores siempre vendrán. Los jugadores y los aficionados del City sabían que la canción tenía que sonar fuerte en sus corazones. Ese día más de uno descubrió que "era necesario dejar el miedo atrás, para empezar a hacer las cosas un poco mejor".
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